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23.2 LA PERFUSIÓN


23.2 PERFUSIÓN

Perfusión es la circulación adecuada de sangre y oxigeno del aparato cardiovascular a todas las células en diferentes tejidos y órganos en el cuerpo.  También es parte importante del proceso mediante el cual se eliminan los productos de desecho producidos por las células.  El choque o hipoperfusión, se refiere a un proceso de colapso de insuficiencia del aparato cardiovascular, que conduce a una circulación inadecuada.  Como en el caso de la hemorragia interna, el choque es una amenaza oculta subyacente, causada por un trastorno médico o una lesión traumática.  Sin embargo, puede reconocer los signos de choque antes, e preparar el tratamiento poco después de iniciarse.

La circulación inadecuada puede conducir a la muerte celular; para proteger a los órganos vitales, el organismo intenta compensarse, dirigiendo el flujo de sangre de órganos que son más tolerante al flujo bajo, como la piel y el intestino, a órganos que no pueden tolerar un flujo reducido como el corazón, el encéfalo y los pulmones.  Si los trastornos que causan el choque no se atienden con rapidez, el paciente puede morir pronto.

El aparato cardiovascular está constituido por tres partes: bomba o corazón, un conjunto de tubos o vasos sanguíneos y el contenido del contenedor o sangre.  Estas tres partes se conocen como el triángulo de la perfusión.  Cuando un paciente está en choque, uno o más de los tres lados, no está trabajando de manera correcta.

La sangre es el vehículo para el traslado del oxígeno y los nutrientes a través de los vasos, hacia los lechos capilares, donde estos suministros son cambiados por productos de desechos.  La sangre continua en movimiento como resultado de la presión que es generada por las contracciones del corazón, y afectada por la dilatación y contrición de los vasos.  Esta presión llamada tensión arterial, suele ser cuidadosamente controlada por el cuerpo en forma tal que siempre hay suficiente circulación o perfusión, en los diversos órganos y tejidos.  La tensión arterial es de hecho, una medición aproximada de la perfusión.

Recuerde que la tensión arterial es en realidad la presión de la sangre dentro de los vasos a todo momento.  La presión sistólica es el punto máximo de la tensión o presión arterial, generada, cada vez que el corazón se contrae;  la presión diastólica es la presión que se mantiene dentro de las arterias mientras el corazón reposa entre los latidos.

El flujo sanguíneo a través de los lechos capilares, es regulado por los esfínteres capilares o paredes musculares circulares, que se contraen y dilatan.  Estos esfínteres, están bajo el control del sistema nervioso autónomo, el cual regula funciones involuntarias como la sudoración y la digestión.  Los esfínteres capilares también responden a otros estímulos, como el calor, el frío, la necesidad de oxígeno y la necesidad de eliminación de las sustancias de desecho.  Tenga en cuenta que bajo circunstancias normales no todas las células tienen las mismas necesidades al mismo tiempo.

Por ejemplo: el estómago y los intestinos tienen una alta necesidad de flujo sanguíneo cuando se come, y después de esto, cuando la digestión está a su nivel más alto.  Entre las comidas el flujo de sangre disminuye y se deriva a otras áreas.  El encéfalo, en contraste, necesita para funcionar un abastecimiento constante y consistente de sangre.

Así, la regulación del flujo sanguíneo es determinada por la necesidad celular que se alcanza por contrición y dilatación vascular.  El mantenimiento del flujo sanguíneo, o perfusión, se logra con el trabajo conjunto del corazón y los vasos sanguíneos.

Sin embargo, la perfusión requiere de más que de solamente el trabajo del aparata cardiovascular.  También precisa de un intercambio adecuado de oxígeno en los pulmones, nutrientes apropiados bajo la forma de glucosa en la sangre y de eliminar adecuadamente los desechos, sobre todo por los pulmones.  El dióxido de carbono es uno de los principales productos de desecho de la actividad celular o metabolismo en el cuerpo, y es retirado por los pulmones.  Esta es la razón por la cual, la ventilación y la oxigenación correcta es una de sus mayores preocupaciones.  El cuerpo tiene mecanismos establecidos para ayudar a soportar los aparatos, respiratorio y cardiovascular, cuando aumenta la necesidad de perfusión de los órganos vitales.  Estos mecanismos, que incluyen al sistema nervioso autónomo y a ciertas sustancias químicas llamadas hormonas, son desencadenados cuando el organismo siente que está fallando la presión en el sistema.

La parte simpática del sistema nervioso autónomo que es el responsable de la respuesta de pelear o huir, asumirá mayor control de las funciones del cuerpo durante un estado de choque.  Esta respuesta del sistema nervioso autónomo, causara la liberación de hormonas como la adrenalina.  Estas hormonas causan cambios en ciertas funciones corporales, como un aumento de la frecuencia cardíaca y en la fuerza de las contracciones del corazón y vaso-constricción en ares no esenciales, principalmente la piel y las vías gastrointestinales o vaso constricción periférica.  Estas acciones juntas, están diseñadas para mantener la presión en el sistema y como resultado la perfusión en los órganos vitales.

Por último, hay un desplazamiento de líquidos corporales para ayudar a mantener la presión dentro del sistema.  Sin embargo, la repuesta del sistema nervioso  autónomo y las hormonas se produce en segundos, es esta respuesta la que causa todos los signos y síntomas de choque en un paciente.

Comunicación y documentación


Comunicación y documentación

En casos que incluyan una intensa hemorragia externa es importante reconocer, estimar y comunicar la cantidad de sangre perdida, que se ha producido y que tan rápido y por cuanto tiempo ocurrió.  Este es un desafío, en especial si la superficie es humada, absorbe líquidos o si el ambiente es oscuro.  Por ejemplo: puede informar que se perdió aproximadamente un litro de sangre o que la sangre empapo a través de tres apósitos.  Los ejemplos que use para describir la hemorragia no son tan importantes como describirla con claridad.  Con una hemorragia interna, describa el mecanismo de la lesión y los signos y síntomas que le hicieron pensar que está produciendo una hemorragia interna.  Durante el transporte comunique esta información al personal del hospital, para permitir que evalúen los recursos necesarios, como la disponibilidad de salas de operaciones, cirujanos y otros proveedores de cuidados de la salud.  Su informe de traslado al hospital debe actualizar al personal sobre cómo ha respondido el paciente a sus cuidados.  Asegure que su papeleo refleje todas las lesiones del paciente y los cuidados que ha proporcionado, llene minuciosamente el FRAP.

Los vasos sanguíneos y la sangre


Los vasos sanguíneos y la sangre

Hay cinco tipos de vasos sanguíneos

  • Arterias
  • Arteriolas
  • capilares
  • Vanas
  • Vénulas

Al fluir la sangre fuera del corazón, pasa a la aorta, que es la arteria más grande del cuerpo.  Las arterias van haciéndose cada vez menores o más pequeñas al irse alejando del corazón; los vasos más pequeños que conectan las arterias y los capilares se llamas arteriolas.  Los capilares son tubos pequeños con el diámetro del tamaño de un glóbulo rojo simple, que pasan entre las células del cuerpo, conectando las arteriolas  y las vénulas.  La sangre que sale del lado distal de los capilares fluye  hacia el interior de las vénulas,  estos vasos pequeños de pared delgada, se vacían en las venas, y a su vez lo hacen en la vena cava.  Este es el proceso que retorna la sangre al corazón en el lado venoso del aparato circulatorio.  El oxígeno y los nutrientes pasan con facilidad de los capilares a las células, de igual forma los desechos y el dióxido de carbono se mueven hacia afuera de las células u al interior delos capilares.

Este sistema de transporte permite que el organismo se deshaga de productos de desecho.

En los extremos arteriales de los capilares, y en las propias articulaciones, hay paredes musculares circulares que se constriñen y dilatan bajo el control del sistema nervioso autónomo.  Cuando se dilatan, la sangre pasa a los capilares en proximidad a cada célula del tejido circundante;  cuando se cierran o contraen, no hay flujo sanguíneo capilar.  Los músculos de los vasos sanguíneos se dilatan y contraen en respuesta a ciertas condiciones como por ejemplo: el temor, el calor,  el frio o necesidades específicas de oxígeno así como también, la necesidad de eliminar los desechos metabólicos.  En un individuo sano, los vasos nunca están completamente dilatados ni totalmente contraídos al mismo tiempo.

El último componente del aparato cardiovascular es la sangre  (el contenido del contenedor).  La sangre tiene glóbulos rojos o eritrocitos,  glóbulos blancos o leucocitos, plaquetas y un líquido llamado plasma.  

Como se expuso en el capítulo del cuerpo humano, los glóbulos rojos son responsables transportar el oxígeno a las células y del transporte del dióxido de carbono, o producto de desecho del metabolismo celular, hacia afuera de las células  de los pulmones, donde es espirado y retirado del cuerpo.

Las plaquetas son responsables de la formación de coágulos sanguíneos.  En el organismo se forma un coagulo de sangre dependiendo de uno de los siguientes principios: estasis de la sangre, cambios en la pared vascular como en una herida y la capacidad de la sangre de coagularse, debido a un proceso patológico o por un medicamento.  Cuando se produce una lesión en los tejidos del cuerpo, las plaquetas comienzan a acumularse en el sitio de la lesión; esto causa que los glóbulos se vuelvan pegajosos y se junten formando grupos.  Cuando estos comienzan a aglutinarse, otra sustancia en el organismo, llamada fibrinógeno, los refuerza.  Este es el paso final en la formación de un coágulo sanguíneo.  Los coágulos sanguíneos son una respuesta importante del cuerpo para controlar la pérdida de sangre.  Algunas enfermedades que interfieren con el proceso normal de coagulación las veremos más adelante.

El sistema nervioso autónomo, vigila las necesidades del cuerpo de momento a momento y ajusta el flujo sanguíneo, adaptando el tono vascular, según se requiera.  Durante situaciones de urgencia, el sistema nervioso autónomo, redistribuye a sangre automáticamente, disminuyéndola de otros órganos hacia el corazón, el encéfalo, los pulmones y los riñones.  De esta forma, el aparato cardiovascular es dinámico y se adapta de manera constate a las condiciones cambiantes del organismo para mantener la homeostasis y la perfusión.  En ocasiones cuando el sistema falla al proporcionar circulación suficiente para que cada parte realice su propia función,  este trastorno se llama hipoperfusión o choque.

Trauma torácico


Trauma torácico

El tórax contiene al corazón, los pulmones y los grandes vasos del cuerpo.  Cuando se produce una lesión en esta parte del organismo, pueden producirse muchas lesiones que ponen en peligro la vida.  Por ejemplo: cuando las costillas se rompen y la pared del tórax y este no se expande de manera normal durante la respiración, se interfiere con la habilidad de cuerpo de obtener oxígeno para las células.  También pueden producirse contusiones en el corazón y causar un latido cardíaco anormal.  Los grandes vasos pueden desgarrarse dentro del pecho, causando una hemorragia masiva oculta, que mata con rapidez al paciente traumatizado.  En algunas lesiones del tórax los pulmones se contunden, interfiriendo con el intercambio normal de oxigeno del organismo.

Algunas lesiones torácicas pueden ser el resultado de una acumulación de aire entre el tejido pulmonar y la pared torácica.  Al acumularse aire en este espacio, el tejido pulmonar se comprime interfiriendo de nuevo con la habilidad del cuerpo de intercambiar oxígeno.  Esta lesión se llama neumotórax.  Si se deja sin tratar o no se reconoce, el tejido pulmonar se comprime por la presión del aire, hasta que también el corazón es comprimido y no puede bombear sangre, este trastorno se llama neumotórax por presión y es una situación de urgencia o condición amenazante de vida.  Algunos pacientes presentan una hemorragia en esta parte del tórax; en vez de recolectarse aire, se acumula sangre en este lugar, interfiriendo con la respiración.  Este trastorno se llama hemotórax y también es una condición amenazante de vida.

Pasos del Examen físico detallado


Pasos del Examen físico detallado

Este examen está organizado por las regiones del cuerpo, se presentan algunas evaluaciones adicionales que quizá desee practicar durante el examen detallado.  Al evaluar cada región inspecciones y palpe, para encontrar evidencia de lesiones, usando la mnemotecnia DCAP-BLS-TIC. Así:

  1. Observe la cara buscando posibles laceraciones, contusiones o deformaciones obvias.
  2. Inspeccione el área alrededor de los ojos, y los parpados
  3. Examine los ojos por enrojecimiento y lentes de contacto
  4. Vea detrás de las orejas por equimosis (signo de Battle)
  5. Use la linterna de bolsillo buscando drenaje de líquido cefalorraquídeo o sangre en los oídos.
  6. Busque contusiones y laceraciones en la cabeza, palpe por hipersensibilidad, depresión del cráneo y deformidades.
  7. Palpe los huesos malares por hipersensibilidad e inestabilidad.
  8. Palpe los maxilares superiores
  9. Palpe la mandíbula
  10. Examine la boca y nariz por presencia de cianosis, cuerpos extraños, incluyendo dientes flojos y prótesis dentales, hemorragias, laceraciones o deformidades.
  11. Verifique olores inusuales en el aliento del paciente.
  12. Observe el cuello por laceraciones, contusiones o deformidades obvias.
  13. Palpe la frente y la nuca por posibles hipersensibilidades y deformaciones.
  14. Busque las venas yugulares distendidas, note que las venas del cuello distendidas no son necesariamente significativas en un paciente que está acostado
  15. Observe el pecho por signos obvios de lesión, antes de iniciar la palpación, asegúrese de observar el movimiento del pecho con las respiraciones.
  16. Palpe suavemente las costillas por hipersensibilidad. Evite presionar sobre contusiones o fracturas obvias.
  17. Escuche los campos pulmonares sobre las líneas medio clavicular y medio axilar
  18. Escuche  las bases y vértices de los pulmones.
  19. Observe el abdomen y la pelvis por laceraciones, contusiones u deformidades obvias.
  20. Palpe suavemente el abdomen buscando hipersensibilidades. Si el abdomen está excepcionalmente tenso, debe describirlo como rígido.
  21. Comprima suavemente la pelvis por los lados y examine posible hipersensibilidad.
  22. Presione suavemente las crestas ilíacas por inestabilidad, hipersensibilidad o crepitación.
  23. Inspeccione las cuatro extremidades buscando laceraciones, contusiones, edemas, deformidades, y etiquetas o brazaletes de alerta médica.
  24. Examine la espalda por posible hipersensibilidad o deformaciones, recuerde, si sospecha de una lesión de médula espinal, sea precavido y para virar como un todo el tronco del paciente.

Evalúe y controle las hemorragias externas – evaluación inicial


Evalúe y controle las hemorragias externas

El siguiente paso consiste en identificar cualquier hemorragia externa.  En algunos casos, la pérdida de sangre puede ser muy rápida y dar lugar a desencadenar un choque de forma muy rápida así como también la muerte.  Por lo tanto este paso exige su atención inmediata una vez se ha establecido la vía aérea y la respiración del paciente.

Los signos de pérdida de sangre incluyen hemorragias activas de heridas, o evidencia de sangrado, como sangre en la ropa y/o cerca del paciente.

La hemorragia intensa de una vena grande se caracteriza por un flujo regular de sangre, mientras que la hemorragia de una arteria se caracteriza por un flujo intermitente, en chorros de sangre.

Cuando evalúe a un paciente inconsciente, busque sangre, recorriendo rápida y suavemente con sus manos enguantadas de la cabeza a los pies, haciendo pausas periódicas para ver si sus manos están manchadas de sangre.

Controlar las hemorragias externas frecuentemente es muy simple.  La presión directa inicial con su mano enguantada y un apósito o vendaje estéril sobre la herida, controlará la hemorragia en la mayor parte de los casos.  Esta presión directa detiene la hemorragia y ayuda a coagularse la sangre de forma natural.  Con mucha frecuencia la hemorragia se puede controlar de manera adecuada usando presión directa, junto con la elevación de la extremidad, si la hemorragia se presenta en brazos o piernas.  Cuando la presión directa y la elevación no tienen éxito, entonces puede aplicar presión directa sobre los puntos de presión arteriales.

Pacientes inconscientes – evaluación de la vía aérea


Pacientes inconscientes

Con su paciente inconsciente o un paciente con disminución de conciencia, debe examinar inmediatamente la permeabilidad de la vía aérea.  Si esta despejada, puede continuar con su evaluación.  Si la vía aérea no esta despejada, su siguiente prioridad es abrirla.  Una obstrucción de la vía aérea en un paciente inconsciente, se debe comúnmente a la relajación de los músculos de la lengua, lo que permite que la lengua se ruede a parte posterior de la garganta.  Prótesis dentales, coágulos de sangre, vómito, moco, alimentos u otros objetos extraños pueden producir obstrucción.  Los signos de una obstrucción de la vía aérea en un paciente incluyen los siguientes:

  • Traumatismo obvio, sangre, u otra obstrucción.
  • Respiración ruidosa, ronquidos, burbujeo, gorgoteo, graznidos, u otros ruidos anormales (la respiración normal es silenciosa)
  • Respiración extremadamente superficial o ausente (las obstrucciones de la vía aérea pueden deteriorar la respiración).

Si la vía aérea no es permeable, debe abrirla cuando sea necesario usando las maniobras de inclinación de cabeza-levantamiento de mentón o de tracción mandibular, y usar un complementario de la vía aérea tanto como sea necesario.

El cuerpo no tendrá oxigeno necesario para sobrevivir si la vía aérea no se trata rápida y eficientemente.  Recuerde que el posicionamiento de la vía aérea depende de la edad y e l tamaño del paciente.

VÍA AÉREA ABIERTA – PERMEABLE


7.5 VÍA AÉREA ABIERTA

La atención médica de emergencia se inicia asegurando la vía aérea abierta.  Los primeros pasos de su evaluación son: el estado de la vía aérea y la respiración del paciente; a menos que usted pueda abrir y mantener la vía aérea permeable de inmediato, no puede proporcionar una atención eficaz al paciente.  Independientemente del estado del paciente, la vía aérea debe permanecer permeable en todo momento.

Cuando responde a un llamado y encuentra a u paciente inconsciente, usted necesita determinar inmediatamente si el paciente tiene la vía aérea permeable y si la respiración es adecuada.  Para abrir con mayor eficacia la vía aérea y evaluar la respiración, el paciente debe estar en posición supina.  Sin embargo, si su paciente está en posición que retarda su colocación en posición supina por ejemplo, atrapado en un vehículo accidentado, la vía aérea del paciente se debe abrir y evaluar en la posicionen que lo encuentre.  Si su paciente está en posición prona (tendido con la cara hacia abajo), debe reposicionarlo para permitir la evaluación de la vía aérea y la respiración, e iniciar RCP, en caso de que sea necesario.  El paciente debe girarse como un todo, de tal forma que la cabeza, cuello y columna vertebral se muevan juntas, sin torcerse.  Los pacientes inconscientes, en especial cuando no hay testigos que puedan descartar un traumatismo, deben moverse como un todo debido al potencial de una lesión raquídea.

  1. Arrodíllese junto al paciente. Haga que su compañero se arrodille suficientemente lejos, de tal forma que cuando el paciente se ruede hacia usted, no llegue a reposar sobre su cuerpo.  Coloque sus manos detrás dela cabeza y cuello del paciente, para proporcionarle estabilización de la columna cervical, en línea, mientras su compañero endereza las piernas del paciente.
  2. haga que su compañero coloque sus manos en el hombro y cadera del paciente.
  3. Al hacer la cuenta para controlar el movimiento, haga que se compañero vire al paciente hacia usted, tirando del hombro y cadera. Controle la cabeza y cuello en forma tal que se mueva como un todo con el resto del torso.  De esta forma la cabeza y cuello quedan en el mismo plano vertical que la espalda.  Este movimiento siempre minimiza el agravamiento de cualquier lesión potencial de la medula espinal.  En este punto, debe ponerle un collar cervical.
  4. Una vez que el paciente está posicionado, mantenga una vía aérea permeable y verifique la respiración.

En un paciente inconsciente, la obstrucción más común de la vía aérea es su propia lengua, la cual cae hacia atrás, al interior de la garganta, cuando se relajan los músculos de la gargantea y la lengua.

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La dentadura postiza (puentes, cajas) sangre o vómito, alimentos y otros cuerpos extraños, también pueden crear una obstrucción de la vía aérea.  Por lo tanto, siempre debe estar preparado para ayudar a despejar y mantener la vía aérea permeable (abierta).

COMPONENTES DE LA SANGRE


COMPONENTES DE LA SANGRE

La sangre es un líquido rojo espeso, complejo, formado por plasma, glóbulos rojos llamados eritrocitos, glóbulos blancos llamados leucocitos y plaquetas.

El Plasma es un líquido amarillo pegajoso, que transporta las células sanguíneas y nutrimentos.  También transporta material de desecho a os órganos de excreción.  Contiene la mayor parte de los compuestos necesarios para formar un coagulo.

Las moléculas de hemoglobina que contienen hierro en los glóbulos rojos (eritrocitos) dan color a la sangre y transportan oxígeno.  Constituyen cerca del 45% de la sangre.

Los glóbulos blancos  (leucocitos) desempeñan su papel en los mecanismos inmunitarios y de defensa contra la infección.

Las plaquetas son diminutos elementos, con forma de discos, que son mucho menores que las células anteriores.  Son esenciales en la formación inicial del coagulo, mecanismo que detiene la hemorragia.

La sangre saldrá de manera intermitente de una arteria y es de color rojo brillante.

De una vena fluirá como una corriente regular y es de color rojo oscuro.

De los capilares, fluirá de muchos puntos diminutos individuales.  La coagulación toma entre seis y diez minutos

REDUCCIÓN DEL RIESGO Y PREVENCIÓN


2.10      REDUCCIÓN DEL RIESGO Y PREVENCIÓN

PRECAUCIONES UNIVERSALES Y AISLAMIENTO DE SUSTANCIAS O FLUIDOS CORPORALES

La OSHA (Occupational Safety and Health Administration), así como también las agencias respectivas de muchos países, han elaborado y publicado referentes a la reducción de riesgos en los sitios de trabajo y su aplicación, indicando que todos los TEM, y personal de la salud sea entrenado en el manejo de microbios patógenos de la sangre y en la aproximación a los pacientes que puedan tener una enfermedad contagiosa o infecciosa.   Se debe enfatizar el entrenamiento en precauciones con la sangre y líquidos o fluidos corporales,  transmisión por vía aérea y contaminación.

Teniendo en cuenta que los TEM están expuestos a muchos tipos diferentes de infecciones, se ha diseñado un conjunto de precauciones universales para usarse en el tratamiento apacientes; y prevenir entrar en contacto con microorganismos transportados por el paciente.

El contacto directo es la exposición o transmisión de una enfermedad contagiosa por contacto físico.

La Exposición es el contacto con sangre, líquidos corporales, tejidos o gotitas atomizadas en el aire, por contacto directo o indirecto.

Contacto directo o indirecto es la exposición o transmisión de una enfermedad por contacto con un objeto contaminado.  Los catarros o gripas comunes son probablemente propagados de esa forma.

El objetivo de las precauciones universales es interrumpir la trasmisión de microorganismos, sin embargo no quiere decir que protejan contra todas las enfermedades infecciosas.  “Universal” en este contexto significa recordarle que emplee protección en todas las situaciones en las que entre en contacto con el paciente.

También podemos reducir el riesgo de exposición, siguiendo las precauciones de aislamiento de sustancias corporales ASC,  este es un concepto de control de infección y difiere de las protecciones universales porque está diseñado para considerar a todos los líquidos corporales como potencialmente infecciosos. Al observar las precauciones universales, solo asume que la sangre y ciertos líquidos corporales tienen un riesgo de transmisión de hepatitis B y del virus de inmunodeficiencia humana (VIH).

En 1988, en CDC (Centro de Control y Prevención de enfermedades de USA) retiro muchos líquidos corporales como sudor, lagrimas, saliva, orina, heces, vomito, secreciones nasales, y esputo de la categoría del riesgo, a menos que estos líquidos contengan sangre visible.  Sin embargo, en la oscuridad puede no ser posible ver sangre; por lo tanto el TEM debe seguir los protocolos del ASC.

Hemos visto que las enfermedades infecciosas son transmitidas por distintas vías, las más comunes que pueden propagarse en los hospitales son:

  • Sangre o salpicaduras de líquidos
  • Contaminación de una superficie
  • Exposición a piquete de aguja
  • Contaminación bucal por lavado de manos inapropiado

LAVADO APROPIADO DE MANOS

El lavado de manos es quizás la simple y eficaz para controlar la transmisión de enfermedades.  Debe lavarse siempre las manos antes y después de entrar en contacto con un paciente, independientemente de si usa guantes.  Mientras más tiempo permanezcan los microorganismos con usted, mayores serán la probabilidades de que pases a través de las barreras.  Aunque el agua y el jabón no sean protectores en todos los casos, en ocasiones su uso proporciona una excelente protección contra transmisión ulterior de su piel a otros.

Si no se dispone de agua corriente, puede usar sustitutos de lavado de manos sin agua.  Cuando use un sustituto sin agua en el campo, asegúrese de lavarse las manos al regresar al hospital.

El procedimiento adecuado para lavarse las manos es:

1.- Use jabón y agua caliente.

2.- Friccione sus manos al menos de 10 a 15 segundos para formar espuma.  Ponga especial atención a sus uñas.

3.- Enjuague sus manos y séquelas con toallas de papel.

4.- Use la toalla de papel para cerras la llave.

GUANTES Y PROTECCIÓN OCULAR

Los guantes y la protección de los ojos son el estándar mínimo en el cuidado de todos loa pacientes, cuando hay posibilidad de exposición a sangre o líquidos o fluidos corporales.  Los guantes tanto de vinilo como de látex, proporcionan protección adecuada.  Algunos grupos de trabajo utilizan un par de guantes encima de otro, o escoger que tipo de guantes usted mismo.  Debe evaluar cada situación y escoger el guante que le funcione mejor.  (Algunas personas son alérgicas al látex; si sospecha que usted lo es consulte con su supervisor.

Es posible que algunos guantes de vinilo sean mejores para exámenes regulares y los de látex sean más adecuados para procedimientos invasivos.

  • Nunca use guantes de vinilo o látex para labores de limpieza.
  • Cambie los guantes de látex si han sido expuestos a aceite de motor, gasolina, o cualquier producto con base de petróleo.
  • No use vaselina con guantes de látex.
  • Cuando trate una hemorragia profusa, o cualquier otro fluido corporal en abundancia use doble guante.
  • Asegúrese de cambiarse los guantes cada vez que cambie de paciente.
  • Para limpieza y desinfección de su unidad debe usar guantes de trabajo pesado.
  • Nunca use guantes de vinilo o látex para trabajos de aseo.
  • Quitarse los guantes de látex o vinilo requiere de una técnica o método para evitar contaminarse con los materiales de los guantes que ha usado.

1.- Comience quitándose parcialmente un guante.  Con la otra mano enguantada, pince el primer guante por la muñeca – asegúrese de tocar solo el exterior del primer guante y comience a enrollarlo fuera de la mano con el interior hacia afuera.  Deje expuesto el exterior de los dedos en el primer guante.

2.- Use los dos dedos de la primera mano.  Para pinzar la muñeca del segundo guante y comience a tirar de él enrollándolo, de adentro hacia afuera, hacia la punta de los dedos como hizo con el primer guante.

3.- Continúe tirando del primer guante hasta que pueda liberar la segunda mano.

4.- Con su segunda mano, ahora sin guante, prenda el interior expuesto del primer guante y tire de él liberando la primera mano y el ahora libre segundo guante.  Asegúrese de tocar solo superficies interiores limpias con sus manos sin guantes.

En el equipo de protección personal los guantes son el tipo más común.

En muchas operaciones de rescate del Sistema Médico de Emergencia, también se deben proteger sus manos y muñecas de lesiones, para ello puede usar guantes de cuero a prueba de punciones, con guantes de látex por debajo.  Esta combinación le permitirá el uso libre de sus manos con la protección agregada a sangre y fluidos corporales.

Recuerde que el látex y vinilo se consideran desechos médicos y deben eliminarse de manera apropiada.  Los guantes de cuero deben tratarse como material contaminado hasta que puedan descontaminarse de forma adecuada.

La protección de los ojos es importante en caso de salpicaduras de sangre hacia los ojos.  Si esta es una posibilidad entonces deben usar anteojos o gafas para su mejor protección.  Sin embargo si usted usa gafas medicadas o prescritas, estas son aceptadas como protección de los ojos, simplemente deberá agregarle aletas laterales removibles cuando este de servicio.  Los lentes de contacto no se consideran protectores oculares.

BATAS Y MASCARILLAS

Ocasionalmente puede necesitar usar una mascarilla y una bata, ambas proporcionan protección en caso de una salpicadura de sangre extensa.  Las batas se pueden usar en situaciones de parto, en el campo o en la escena o un traumatismo mayor.  No obstante usar una bata en algunas ocasiones puede no ser muy práctico.  De hecho en algunos casos, una bata puede constituir un riesgo de lesión.  Es posible que su delegación o grupo de trabajo tenga una política referente a las batas; asegúrese de conocer el reglamente del sitio donde trabaja.

Hay momentos en los cuales un cambio de uniforme es preferible en caso de tener que eliminar contaminaciones, en los casos de que la desinfección total profesional es imposible y entonces se tendría que eliminar completamente el uniforme.

MASCARILLAS, RESPIRADORES Y DISPOSITIVOS DE BARRERA. 

El uso de mascarillas es un tema complejo, en especial por los distintos requisitos de acuerdo a las legislaciones de cada país, referente a la protección contra tuberculosis entre otras.  Se debe usar una mascarillas quirúrgica estándar si existe la posibilidad de de una salpicadura con sangre o líquidos corporales.  Si se sospecha que un paciente tiene una enfermedad trasmitida por el aire, debe colocarle una mascarilla.  Sin embargo, si sospecha que el paciente tiene tuberculosis, colóquele una mascarilla quirúrgica, y un respirador de partículas de aire de alta eficiencia (HEPA).

Si el paciente necesita oxígeno, colóquele una mascarilla no re-circulante, en lugar de la mascarilla quirúrgica y fije el flujo de aire de 10 a 15 L/min; en este caso no coloque el respirador HEPA en el paciente; esto sería innecesario e incómodo.

Una simple mascarilla quirúrgica reducirá el riesgo de trasmisión de microorganismos del paciente al aire.  El uso del respirador HEPA debe cumplir con los estándares internacionales, que indican que los bellos faciales así como también las patillas largas o bigote, impedirán un ajuste apropiado.

Aunque no hay casos documentados de trasmisión de enfermedades a rescatistas como resultado de practicar reanimación boca-boca sin protección, siempre debe usar una mascarilla con bolsa reservorio o un dispositivo bolsa-válvula-mascarilla (BVM).  La reanimación boca-boca raramente es necesaria en situaciones de trabajo.

Recuerde que las superficies exteriores de estos elementos se consideran contaminadas después de haber sido expuestas al paciente.  Debe asegurarse de que los guantes, mascarillas, batas y todos los demás elementos que se han usado y sido expuestos a sangre, o líquidos corporales sean eliminados apropiadamente, de acuerdo a las directrices o protocolos legales de su país.

Si se pica con una aguja, le cayó sangre o algún líquido corporal en el ojo, o tiene algún tipo de contacto con líquidos o sangre del paciente, informe de inmediato el incidente a su supervisor.

DISPOSICIÓN ADECUADA DE ELEMENTOS CORTANTES Y PUNZANTES

Sea cuidadoso cuando manipule agujas, bisturís y otros materiales afinados.  La propagación del VIH y Hepatitis en servicios de atención médica suele ser relacionada con el manejo descuidado de elementos cortantes.

No vuelva a tapar, no rompa o doble agujas.  Aun los individuos más cuidadosos se pueden pinchar accidentalmente.

Elimine en contenedores rígidos cerrados y apropiados todos los elementos afilados que han estado en contacto con secreciones.

RESPONSABILIDADES DEL EMPLEADOR

Su empleador no puede garantizar un ambiente 100% libre de riesgos.  Tomar el riesgo de exposición o adquisición de una enfermedad contagiosa, es parte de su trabajo.  Usted tiene derecho de saber las enfermedades que pueden representarle un riesgo.  Recuerde que su riesgo de infección no es muy alto; sin embargo, las regulaciones legales de cada país tanto de las agencias privadas como las estatales, requieren que a todos los empleados se les ofrezca un sitio de trabajo donde se reduzca el riesgo a la exposición.

Además de las directrices de la OSHA, la CDC y la FNPA, entre otras están dirigidas a reducir el riesgo por exposición a microorganismos patógenos en a sangre y enfermedades transmitidas por el aire.  Estas agencias establecen un estándar de cuidados para todo el personal de bomberos y del Servicio Médico de Emergencias, y aplica a todos, empleados, de tiempo completo, de medio tiempo o voluntarios.

EQUIPO DE PROTECCIÓN PERSONAL

El EPP es el que bloquea la entrada de un microorganismo al cuerpo, las normas internacionales requieren que este compuesto por:

  • Guantes de vinilo y látex
  • Guantes de uso pesado para limpieza
  • Gafas protectoras
  • Mascarillas, incluyendo respirador HEPA
  • Batas de cobertura
  • Dispositivos para asistencia respiratoria.

El EPP apropiado es seleccionado para cada tarea de acuerdo a la forma en la cual una enfermedad contagiosa se transmite.  Por ejemplo, la transmisión de una enfermedad propagada por el aire se bloquea por una mascarilla.  La sangre que salpica en un ojo puede prevenirse cuando se usa un protector ocular.

Se deben seguir las recomendaciones sobre el uso de EPP, sin embargo los organismos internacionales reconocen que hay tiempos en los cuales los procedimientos no se pueden realizar.  Hay una declaración de “excepción” en la regulación de OSHA que establece que cuando se cree que tomar el tiempo para usar EPP retrasará la prestación de cuidados al paciente o planteará un riesgo para su seguridad puede elegir no usarlo.  El riesgo a la seguridad personal se refiere a la probabilidad de ser atacado por una persona o un animal, no a la preocupación sobre adquirir una enfermedad contagiosa.  Si elige no usar EPP, podría tener que justificar esta acción.  Es su responsabilidad seguir las reglas de una forma razonable y prudente.

PLAN DE CONTROL A LA EXPOSICIÓN

La prevención es la mejor forma de evitar la exposición, por lo tanto siga los protocolos para el aislamiento de sustancias o fluidos corporales, sin embargo a pesar de estas precauciones, su usted o su compañero sufren de exposición accidental, contacte a su dirección médica y/o de aviso al personal del hospital receptor del paciente para que se le incluya en el plan de control de exposición.

Componentes De Un Plan De Control

Determinación de la exposición

  • Determina quien está en riesgo de contacto con sangre y otros líquidos corporales.
  • Crea una lista de tareas que plantean riesgo por contacto con sangre y otros líquidos corporales.
  • Incluye equipo de protección personal (EPP) requerido por las autoridades.

Educación y entrenamiento

  • Explica porque es requerido un individuo calificado para responder preguntas sobre enfermedades contagiosas y control de la infección, más que basarse en paquetes de entrenamiento.
  • Incluye la disponibilidad de un instructor capaz de entrenar al TEM en lo referente a patógenos trasmitidos por sangre y aquellos trasmitidos por aire, como las hepatitis B y C, VIH, sífilis y tuberculosis.
  • Asegura que el instructor proporcione educación apropiada, como mejor medio para corregir muchos mitos que rodean a estos temas.

Programa de vacunación de Hepatitis

  • Explica la vacuna ofrecida, su seguridad y eficacia, mantenimiento de registros, y seguimiento.
  • Se refiere a la necesidad de obtener títulos de anticuerpos posteriores a la vacuna para identificar individuos que no responden a la serie de vacunación de tres dosis.

Equipo De Protección Personal

  • Lista el EPP ofrecido y porqué fue seleccionado.
  • Lista cuanto equipo está disponible y donde obtener adicional.
  • Declara que tipo de EPP debe usarse en cada procedimiento con riesgo.

Prácticas De Limpieza Y Desinfección

  • Describe cómo cuidar y mantener vehículos y equipo.
  • Identifica donde y cuando se debe realizar la limpieza, como debe hacerse, que EPP debe usarse y cual solución de limpieza debe usar.
  • Se refiere a la recolección, almacenamiento y disposición de los desechos médicos

Prueba cutánea de tuberculina/prueba de acceso

  • Se refiere a con qué frecuencia los empleados deben aplicarse la prueba cutánea.
  • Se refiere a que tan frecuente los empleados se deben practicar la prueba de acceso para determinar el tamaño apropiado de la mascarilla para proteger de tuberculosis al TEM
  • Se refiere a todos los asuntos pertinentes con las mascarillas respiradoras HEPA.

Tratamiento exposición

  • Identifica a quien notificar cuando haya ocurrido una exposición, que formularios llenar, a donde acudir para el tratamiento, y que tratamiento se dará.

Consentimiento a la vigilancia

  • Se refiere a la forma en que el servicio o delegación evalúa el consentimiento del empleado en cada aspecto del plan.
  • Asegura que los empleados comprendan lo que han de hacer y porque es importante.
  • Declara que la falta de consentimiento debe documentarse.
  • Indica que acción disciplinaria debe tomarse en presencia de una falta de consentimiento continua.

Mantenimiento de registros

  • Señala todos los registros que se mantendrán, que tan confidencialmente se conservaran y cuando se pueden evaluar los registros y por quien.