Autoridad legal limitada – emergencias de la conducta
Autoridad legal limitada
Como TEM-TUM-TES, tiene autoridad legal limitada para requerir o forzar a un paciente para someterse a la atención médica de emergencia, cuando no existe una emergencia amenazante de vida. Los pacientes tienen derecho a rechazar la atención, no obstante, la mayoría de los países cuentan con estatutos legales respecto a la atención de emergencia de las personas con enfermedades mentales o afectadas por fármacos. Estas legislaciones estatutarias permiten que el personal de policía coloque a ponga a tal persona bajo custodia protectora, de manera que se le pueda proporcionar atención de emergencia. Debe familiarizarse con las leyes respecto a estas situaciones.
La legislación típica establece que “cualquier oficial de policía, que tenga causas razonables para creer que una persona presenta alguna enfermedad mental y es un peligro para sí misma u otros o padece de discapacidad grave, puede tomar a dicha persona bajo su custodia y llevarlo a hacer que la lleven a un hospital general, para que la examinen de urgencia…” de nuevo, dado que tales legislaciones varían, deberá familiarizarse con las provisiones de su país o lugar de trabajo.
La regla general en la ley es que un adulto competente tiene el derecho de rechazar el tratamiento, incluso si este implica cuidados para salvar la vida. No obstante, en casos psiquiátricos, es probable que el ministerio público o el poder judicial consideran apropiadas sus acciones, al proporcionar atención para salvar la vida, en particular si usted tiene una creencia razonable de que el paciente se dañaría a sí mismo o a otros sin su intervención. Además, un paciente que presente cualquier tipo de impedimento, ya sea enfermedad mental, afección médica o intoxicación, no puede considerarse competente para rechazar el tratamiento o traslado.
Estas situaciones se encuentran entre las más peligrosas que encontrara desde un punto de vista legal. Cuando tenga dudas, consulte con su jefe inmediato, un policía o consulte a su dirección médica. Mantenga siempre una actitud pesimista acerca de la condición de los pacientes, suponga lo peor y espere lo mejor. Equivocarse respecto a dar tratamiento y traslado, es mucho mejor y más fácil que defenderse contra los cargos de agresión, que justificar un abandono.
Examen físico enfocado – emergencias de la conducta
Examen físico enfocado
En ocasiones, incluso un paciente que está consciente en una emergencia de la conducta o psiquiátrica, no responderá en absoluto a sus preguntas. En esos casos, quizá pueda decir mucho acerca del estado emocional del paciente a partir de su expresión facial, pulso y respiración. Las lágrimas, el sudor y el rubor, pueden ser indicadores significativos del estado de ánimo. Así mismo, asegúrese de observar los ojos del paciente; un paciente con mirada ausente o rápido movimiento de los ojos, puede presentar una disminución del sistema nervioso central.
Una crisis de conducta, produce un estrés tremendo, sobre los mecanismos que tiene la persona para enfrentar las cosas, incluidas las capacidades naturales y las aprendidas. De hecho, la persona es incapaz de responder de manera razonable a las exigencias del entorno. Este estado puede ser temporal, como en la enfermedad aguda o de vivencia prolongada como en la enfermedad mental compleja y crónica. En cualquier caso, la percepción de la realidad del paciente puede estar comprometida o distorsionada.
Signos vitales iniciales – emergencias de la conducta
Signos vitales iniciales
Obtenga los signos vitales cuando al evalúe al paciente, si no se acentúa la dificultad emocional del paciente. Haga todos los esfuerzos por evaluar la tensión arterial, la respiración, el pulso, la oximetría del pulso, la glucosa, la piel y las pupilas. Recuerde que las emergencias de la conducta, pueden producirse o precipitarse, debido a problemas fisiológicos y pueden exacerbar padecimientos preexistentes. No olvide que la persona física y la persona emocional son una misma.
Evaluación inicial – emergencia de la conducta
Evaluación inicial
Impresión general
Inicie su evaluación desde la entrada. ¿Cuál parece ser el ánimo del paciente?, ¿está calmado?, ¿agitado?, ¿alerta o somnoliento?, Comience por presentarse e informe al paciente que está ahí para ayudarle. Averigüe su queja principal: ¿Qué sucedió?, ¿Por qué llamo a la ambulancia? O ¿en qué le puedo ayudar? Permita que el paciente diga lo que sucedió o cómo se siente. ¿Está alerta y orientado? Emplee la escala ADVI para determinar esto. Para medir la orientación, pregunte al paciente: ¿Dónde se encuentra?, ¿Por qué está aquí? Evalúe los ABC.
Patología-causa de las emergencias de la conducta
Patología: causa de las emergencias de la conducta
Como TEM, TUM, TES, no es nuestra responsabilidad el diagnóstico de la causa subyacente de una emergencia de la conducta o psiquiátrica. No obstante, debemos saber las dos categorías básicas de diagnóstico que utiliza el médico: 1.- orgánicas (físicas) y 2.- funcionales (psicológicas).
El síndrome orgánico cerebral (OC), es una disfunción permanente o temporal del cerebro ocasionada por una alteración en el funcionamiento físico o fisiológico del tejido cerebral. Las cusas de síndrome orgánico cerebral, incluyen una enfermedad repentina, trauma reciente, intoxicación por fármacos o alcohol y enfermedades cerebrales, como la enfermedad de Alzheimer. El estado mental alterado debe considerarse como una característica del síndrome OC y puede derivarse por una hipoglucemia, hipoxia, hipoxemia en el cerebro, hipotermia o hipertermia.
Un trastorno funcional, es aquel en el cual la operación anormal de un órgano no puede rastrearse hasta un cambio obvio en la estructura real, o la fisiología del órgano. Algo está funcionando mal, pero la causa principal no puede ser identificada a través del desempeño del órgano mismo. Esquizofrenia y depresión son claros ejemplos funcionales. Puede haber una causa química o física para estos trastornos, pero no es obvia ni se ha comprendido del todo.
Estos dos tipos de trastornos pueden tener apariencias muy semejantes. Un estado mental alterado, o cambio en la manera en que la persona piensa o se comporta, es un indicador de enfermedades del sistema nervioso central. Un paciente que presenta comportamiento extraño de hecho, puede tener una enfermedad médica aguda que sea la causa general o parcial de la conducta. Reconocer esta posibilidad puede permitirle salvar una vida.